Piedad

ese niño de iracundo periferio plasmado en sombras de lo perdido 
la oquedad desplaya sus marinados océanos 
en brazos de la muerte extiende sus negras alas
y braya la sombra con rumbo lánguido
nefasto, perdido sin vida e hijos
solo sera muerte de su propio destino
que coronado en plagios ciegos
convoca mentira y piedad a los muertos 
la fúnebre silueta vira a su izquierda
y sus mortuorios pasos son vagas legiones
paraíso de tierra negra.
En sus ojos muestran el pozo de su airada alma
marchito y seco fuga de su destierro
un pozo oscuro filtra el agua
que ahogara su poco aliento.
Su belleza es desierto del nemoroso bosque 
que entre humo y pisca muestra su propio destierro
y no lo dices
y no lo muestras
navegas con mirada perdida 
sin horizonte alguno
la canoa vieja y podrida no llegara muy lejos
niño despierta que no soy nadie para escribir esto
pero es algo de lo que siento
no nades en tus mentiras y proezas 
no preguntes por la vida 
ni comas de ella
suelta de tus brazos las falsas promesas
y no seas rubro de los que te alimentan!!